jueves, 26 de junio de 2014

Santos y Zuluaga: Ignorados en La Guajira

Ninguno de los dos convenció a los guajiros

Por: | junio 19, 2014
Santos y Zuluaga: Ignorados en La Guajira
La oligarquía Colombiana esta de pláceme con el éxito contundente de la democracia colombiana en el proceso de elección presidencial que concluyó el pasado 15 de junio con la reelección de Juan Manuel Santos.
Están embriagados con su victoria y parece que no les preocupa que la abstención se constituya en una constante. No encuentran el discurso que les permita conectarse con el pueblo y se ven obligados a convertir sus derrotas en triunfos.
Eso fue exactamente lo acontecido en la segunda vuelta de las presidenciales. Se los tragó nuevamente la abstención, que alcanzó el 52,13%. La Registraduría Nacional, especificaba que  de un total de 15.785.705 personas sólo 32.975.158 de las inscritas en el censo acudieron a ejercer su derecho al voto. Significa, que un número aproximado de 17.189.453 de colombianos se abstuvieron de votar. Además 619.295.000 lo hicieron en blanco. Nuevamente el pueblo colombiano deslegitima un proceso electoral  el cual no estuvo exento de los vicios ya conocidos en la alicaída democracia colombiana.
En la Costa Caribe la abstención superó la media nacional
Un 56.46% alcanzó la abstención en la segunda vuelta presidencial lo cual nos lleva a pensar que se mantiene un descontento generalizado en una región agobiada por el exacerbado centralismo. La Guajira sigue como el departamento con el mayor porcentaje de abstención electoral.
La Registraduría Nacional del Estado Civil mencionaba que de los 515.571 ciudadanos aptos para votar solamente lo hicieron 171.136 personas es decir un 33.19%. No fueron a las urnas un número aproximado de 344.435 personas. En blanco votaron 2.779 ciudadanos. Hay que anotar además, que se contabilizaron 1.767 votos nulos y unos 444 votos no marcados. ¿Qué escenario tenemos?: ¿un desgano electoral? ¿Un descontento generalizado? ¿Contra quienes el desgano o el descontento?
La Guajira un departamento “olvidado”
La Guajira es recordada al momento de las cuentas de El Cerrejón y demás recursos naturales o en los planes de agresión al pueblo venezolano. En otros aspectos ha sido un departamento históricamente olvidado por los gobiernos de turno.
Tengo la certeza de que este abstencionismo en la Guajira castiga de alguna manera el oportunismo político típico de los procesos electorales pero también refleja un ajuste de cuentas con aquellos que literalmente han saqueado este departamento. Los gobernadores no han sido capaces de solucionar los problemas álgidos de la Guajira: servicios públicos, hambre, corrupción, desempleo y carencia de vida digna.
Además los  guajiros tenemos muy presente  que fue el gobierno Santos  quien amparado en un discurso engañoso despojo de un solo tajo a La Guajira de una de sus entradas económicas más rentables, las regalías. Causa indignación la muerte de niños indígenas  por física hambre. Es inaceptable que los gobiernos hayan permitido la muerte de 2.969 niños entre el 2008 y el 2013 en este departamento. Así lo asegura el ex director de planeación de La Guajira, Cesar Arizmendy.
Así mismo después de una inversión estipulada en los  100 mil millones de pesos al año en programas para contrarrestar el hambre. Solo en la administración de Jorge Pérez B se invirtieron 75.435.496.638de pesos de regalías en diferentes programas de asistencia alimentaria y recuperación nutricional en el marco del programa departamental  -L  Guajira sin Jamushiri (periódico La Guajira-30-Enero-2012).  También la líder indígena Matilde López Arpushana denunciaba que “Lamentable que mientras nuestros niños mueren de hambre, al Festival “Francisco el hombre”, la nación le giraba $460.000.000.000”.
Lo más repugnante es que Juan Manuel Santos expresaba que “Hay más desnutrición  de los niños en La Guajira que en el Choco” (Diario del Norte. 23-08-2010) no movió un dedo para evitar esta tragedia.
Sed e insalubridad
En otro escenario de la ignominia, Riohacha es la única ciudad capital de la Costa Caribe que no cuenta con  acueducto y alcantarillado óptimo. Pero lo más inverosímil es que en el año 2013 se inició lo que la ‘clase política’ denominó con bombos y platillos la revolución de los pozos profundos. El pueblo Guajiro aún espera el Plan Departamental de Agua que sirvió de pretexto para obtener con la Banca Mundial un empréstito por 90 millones de dólares (2007) un despilfarro descomunal  de recursos.
Riohacha sigue con las albercas en las casas que se constituyen en trampas mortales para los niños algunos han fallecidos en ellas y los carros tanque con agua cruzando las calles de la capital ¡qué vergüenza!
Para colmo de males la administración Rafael Ceballos saca un haz debajo de la manga la empresa  de agua ASSA (calmar la sed, en Wayuunaiki) la cual golpea a los usuarios, con recibos caros y un pésimo servicio. aAlos hogares llegan estos recibos de cobro sin tener  el  servicio de manera permanente y más aún están instalando medidores de agua en los hogares riohacheros.
Al caído caerle
El relicario de injusticias se extiende a la red hospitalaria. ¿Porque los políticos de la Guajira no salen a  defensa de la red hospitalaria de este departamento?
La organización sindical del sector salud en la Guajira se cansó de advertirle a las administraciones del orden departamental y nacional la precariedad  y el caos reinante en  la red hospitalaria en el departamento y el impacto que tiene en los sectores sociales, fundamentalmente en los pueblos indígenas de la Guajira.
Es el resultado de una política de salud que agobia y arruina a los hospitales en Colombia. Es el neoliberalismo, política que se refrendó el pasado 15 de junio con la reelección de Santos.
La energía otro flagelo
El comportamiento de Electricaribe es humillante. Tiene sometido a  esta región a permanentes racionamiento. Riohacha y demás pueblos de la Guajira son castigados con cortes de luz por horas  y de manera permanente.
Santos en una de sus visitas a La Guajira expresó con relación  Electricaribe: “Si en diciembre Electricaribe no ha mejorado el servicio tendremos problemas” (Diario del Norte. 24-09-2012).
El gobierno anunció inversiones por el orden de los $2.5 billones para el sector energético de la Costa (El Heraldo. 07-05-2014) los racionamientos no dan tregua, los anuncios por parte de altos miembros del gobierno nacional no logran amainar esta  grave crisis. Electricaribe, los tiene como trapitos de cocina.
La Guajira ha quedado excluida de unos de los proyectos más importantes para la Región Caribe como lo indica el sistema de transporte integrado regional que se podría concretar a través de la construcción y operación de un tren que uniría las tres capitales: Cartagena, Barranquilla y Santa Marta.
¿Cómo puede La Guajira, catapultarse como región polo de desarrollo si es excluida de los proyectos que pueden generar desarrollo?
Nos dejan la opción de la ilegalidad pero cargada de la misma desigualdad y marginamiento porque el contrabando de gasolina nos muestra de día a los pobres pimpineros y de noche el gigantesco carro-tanque cargado de gasolina rumbo al interior del país. ¿Quién usufructa de este ilícito? No es el Guajiro precisamente. Como tampoco lo fue en la bonanza marimbera, ni en los mejores tiempos del contrabando.
Menos aún, disfrutamos de una bonanza, como la del carbón.
Politiqueros de marras… ¡lárguense!
Podemos mencionar además que los políticos en La Guajira en las diferentes campañas electorales hicieron caso omiso de un debate obligado para el año 2015: las metas del milenio.
La Guajira se raja en todo. Otra vergüenza para los gobernantes de este país.
Estas son las razones de la alta abstención en el departamento de La Guajira tema que motivó estas líneas.
El abandono estatal, la corrupción incontrolable y las mentiras unas detrás de las otras. Este Congreso elegido el pasado 9 de marzo se la jugará con todas sus argucias para imponer el voto obligatorio como última opción para controlar la generalizada abstención electoral que expresa un amplio rechazo popular que materializa la ilegitimidad del régimen. Claro, como siempre, dada su decadencia imparable, buscan el camino más fácil  para la solución de los problemas álgidos.